Los brotes de enfermedades infecciosas y/o parasitarias en el ganado generalmente tienen un impacto económico significativo, que no solo comprometen a las empresas agropecuarias afectadas, sino que también a la comunidad y al País.
Introduzca sólo animales de procedencia y estatus de salud conocido.
Un rebaño cerrado ofrece la mejor seguridad contra la introducción de enfermedades, aunque eventualmente para mejorar la producción y la diversidad se introduce nuevo material genético. No solo se debe considerar el peligro potencial de introducir una enfermedad cuando se compra ganado, sino que éste debe ser analizado cuando se compra semen, embriones u óvulos dentro de un programa de reproducción artificial.
Compre ganado vivo directamente del productor.
En forma ideal, el stock nuevo de reemplazo debería ser adquirido directamente del productor. Esto asegura que usted puede conocer los registros asociados a los tratamientos y vacunaciones del ganado que usted esta adquiriendo.
Introduzca material genético- semen, óvulos, embriones- provenientes de animales examinados y sanos.
Las compañías involucradas en el negocio reproductivo realizan exámenes y pruebas muy completas para asegurar que el semen, los óvulos y embriones se encuentren libres de enfermedad. Sin embargo, eventualmente se pueden introducir enfermedades como la leucosis, tricomoniasis, etc., si es que el material genético no ha sido sometido a un examen especifico para aquellas patologías u otras. Consulte siempre a su proveedor de material genético.
Introduzca y reciba el forraje en un área pequeña dentro del predio.
Es importante tener un conocimiento exacto de la fuente de origen del alimento para el ganado. El heno, ensilaje y los granos es probable que contengan semillas de malezas nocivas las que pueden ser introducidas al predio. El resultado se traduce en pérdidas productivas significativas y la implementación de programas de control de malezas de alto costo. Trate de alimentar al ganado en áreas pequeñas en las cuales se pueda detectar a tiempo los problemas de malezas y si se presentan se erradicarán a un costo mínimo.
Evite el contacto con otros animales.
El evitar el contacto con otros animales en potreros vecinos puede prevenir la de diseminación de alguna enfermedad a través de contacto directo (nariz a nariz) sobre los alambres de la cerca. Esto se puede lograr mediante la utilización de cercos eléctricos u otro medio. Los cercos en buen estado de mantención y a prueba del ganado también reducirán la posibilidad de traspaso de animales de un potrero a otro.
Practicas preventivas de salud animal y de manejo.
La vacunación del ganado contra las enfermedades prevalentes en la región es la forma mas efectiva de minimizar el impacto económico que éstas pueden tener para su empresa. Un plan de vacunación específico debería ser implementado en conjunto con su consejero veterinario.
Puede ser importante desinfectar o cambiar entre un animal a otro el equipo usado para algunas maniobras o procedimientos. Pídale consejo a su veterinario sobre estas materias.
Conclusión.
Una tarea importante que debe enfrentar el ganadero es traducir el concepto de la Bioseguridad en pasos simples y que sean comprendidos y practicados en todos los trabajadores del predio y/o los contratistas. Para mayor información acerca de alternativas de planes de Bioseguridad que se ajusten a su predio consulte a su médico veterinario acreditado o privado.
Dr. Jorge E. Muñoz R.
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